Algunas fotografías por el lugar, los componentes, por la historia que hay detrás, han hecho de estas imágenes, los besos más famosos de la historia.
Porque...
¿Habrá algo más bonito que un beso?


Beso
del hotel de Ville
Es la
foto más vendida de la historia con 410.000 copias vendidas. El famoso beso del
hotel de Ville fotografiado por Robert Doisneau en 1950 nos muestra a dos
enamorados que se funden en un beso pasional entre la multitud. Sin embargo, 42
años más tarde de la toma de la fotografía salió a la luz la historia real. El
fotógrafo había contratado a dos actores desconocidos para que posaran para él
de forma natural en las calles de París. 13 años más tarde, la actriz,
Françoise Bornat vendió la copia de la original firmada por el propio fotógrafo
por un valor de 200.000 dólares.
Beso
Marlene Dietrich
La foto
fue tomada en la ciduad de Nueva York por Irvin Haverman. La famosa actriz
Marlene Dietrich besó a un afortunado soldado al azar a su llegada tras la II
Guerra Mundial.
Beso
en Times Square
El
famoso beso de Times Square es una de las fotografías más famosas detrás de la
cual hay una historia. El muchacho era un un soldado estadounidense recién
llegado de la batalla tras vencer a Japón en la II Guerra Mundial. Eufórico,
cogió a una joven enfermera y la besó. El fotógrafo, Alfred Eisentaedt que
presenció el espontáneo beso capturó en el momento en la que es consideradas
una de las fotos más famosas de la historia.
30 años
más tarde de la toma de la fotografía, la joven enfermera, Edith Shain, se puso
en contacto con el artista para revelarle su identidad. El nombre del joven
sigue siendo un misterio, ya que numerosos ex-combatientes afirman haber estado
allí en el momento que se realizó la fotografía.
60 años
más tarde de este momento, Edith hizo un llamado a todos aquellos que
participaron en la guerra animándoles a participar en un encuentro emotivo y
singular.
“El
Beso” de Gustav Klimt
El
autor de esta obra es el pintor austriaco Gustav Klimt (Viena 1862-1918). La
obra se ha relacionado, desde la visión de la iconografía, con el relato de
Ovidio en el que Apolo besa a Dafne y ésta se convierte en laurel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario